martes, 25 de noviembre de 2014

MI HIJO ES “MENTIROSO”

Todos alguna vez hemos escuchado el cuento del Pastorcito mentiroso, que una y otra vez, engaña a los campesinos diciendo que el lobo ataca a las ovejas...pero también conocemos el triste final, el festín que finalmente se hace el lobo con el rebaño delante del rostro atormentado del niño...los campesinos, incrédulos al llamado..pues el pastorcito reiteradamente los había “engañado”.

¿Por qué miente el niño?
Conocer la causa por la que ha mentido tu hijo te ayudará a entenderle y a saber cómo actuar. Lo principal es hablar con el niño para descubrir el motivo que le ha llevado a mentir. Estas son las principales causas:

– Por miedo. Hay niños que tienen miedo de las consecuencias de sus acciones, por eso suelen mentir. Suele ocurrir cuando viven en un entorno sujeto a reglas muy estrictas o si tienen padres muy autoritarios, o si no tienen libertad para hablar con sus progenitores
– Para proteger a alguien.
– Porque es muy imaginativo y la verdad le aburre. 
– Para evitar una tarea que no le gusta realizar: “¿Te has lavado los dientes?”, pregunta el padre.  “Si papá” , responde el niño (pero en realidad no se los ha lavado).
– Por error. Cometen una acción involuntaria, como por ejemplo romper un jarrón, y no saben salir  de la situación.
– Por amor, para su aprobación, y porque a los niños les gusta impresionar a la gente con rapidez.
– Por imitación. Si el padre o la madre mienten, el niño también lo hará. “Si ellos observan y viven la mentira de manera cotidiana, aprenden a hacerlo como algo normal”. Por ejemplo, si escucha a la madre decir por teléfono: “dile que no estoy.”

COMO ACTUAR Y QUÉ HACER

 Hay que recordar  que uno de los motivos principales que lleva a un niño a mentir es el miedo. “En cierto modo  la mentira es una conducta de evasión del castigo”, si se castiga al niño por mentir, los padres corren el riesgo de reforzar el miedo, lo que aumenta la probabilidad de que el pequeño mienta en el futuro. El niño puede pensar que no lo castigan por mentir sino por descubrir la verdad, y es muy probable que la próxima vez busque formas más sofisticadas de mentir para no ser descubierto. Todos los niños mienten. “Las mentiras preocupantes son las que cuentan para conseguir que castiguen a otros, en este caso hay que hacerles ver las consecuencias de su conducta”. Todos los niños mienten. Sin embargo, lo que más debe preocupar a los padres es la mentira compulsiva. “Cuando el niño miente sin ninguna razón aparente y con frecuencia. Los  padres de estos niños tienden a sospechar y desconfiar de sus hijos, y estos pequeños cada vez se hacen más rebeldes y deshonestos. Aquí hay que buscar las causas y pedir ayuda al psicólogo infantil. 
– Descubrir la causa. Es muy importante averiguar los motivos que le han llevado a mentir. Y asegurarse de que ha mentido, “es muy contraproducente acusarle de mentiroso cuando no lo ha sido”.
– Dar ejemplo. Los padres deben ser un buen ejemplo para sus hijos y que no mientan. De acuerdo a las capacidades evolutivas del niño, es conveniente buscar la manera de enseñarle sobre la honestidad, identificar lo real de lo imaginado.
– Felicitar o premiar al niño que confiesa la verdad . Explicarle que lo que ha hecho no está bien y negociar de forma democrática las consecuencias de sus actos.
– Favorecer un  ambiente de confianza. Así el niño se encontrará cómodo y en libertad para contar sus errores o conductas no adecuadas. “Que no sienta que cada vez que habla habrá consecuencias negativas”.
– El castigo, sólo se debe utilizar en casos extremos. “Si nos vemos incapaces de corregir esta conducta entonces hay que pedir ayuda a un profesional”.
Gánate su confianza
Es necesario que  hables con tu hijo y le expliques. Los beneficios de la verdad, la honradez y la confianza. Háblale también de que las consecuencias de la mentira y el engaño solo crean desconfianza en los demás, pierde su credibilidad y se siente mal consigo mismo:
• Explícale a tu hijo que mientras diga la verdad, no sufrirá ningún castigo. 
• No dejes pasar su mentira, pero tampoco lo castigues. 
• Felicítalo cuando  afronte y reconozca la verdad a pesar de saber que a sus padres no les va a gustar.
• Para evitar que recurra al engaño, crea un ambiente de autenticidad donde lo importante sea la coherencia, sinceridad, aceptación plena, tolerancia y libertad.
• Si los padres reaccionan con explosiones exageradas, castigos o amenazas, el niño será el primer sorprendido descubrirá que tienen un enorme poder y las dirá de nuevo.
La frase "los niños siempre dicen la verdad" no siempre es cierta, algunos pequeños sí mienten y a veces demasiado.
 La mentira es una habilidad que todos los niños aprenden, algunos la ejercitan más que otros.

Pasos que podrás poner en práctica para que tu hijo deje de mentir.

1
Explícale lo importante que  es tener credibilidad. Pregúntale a tu hijo si le gustaría trabajar contigo en éste tema.
2
Se un ejemplo para tu hijo. Si ve que  mientes pensará que  está bien mentir. En cambio si ve que dices la verdad, sin importar lo difícil que sea, entonces estarás siendo consecuente con lo que predicas.
3
Disciplina a tu hijo con un tiempo de aislamiento o al negarle ciertos privilegios cada vez que mienta. Explícale que lo estas castigando por mentir y no por la acción por la cual mintió.
4
Recompénsalo por decir la verdad. Enséñale a que diga la verdad y después recompénsalo por haberlo hecho. Asegúrate de que entienda que le das una recompensa por no mentir.
5
Déjale saber que valoras más la verdad que el comportamiento indebido y que te enojará más la mentira que algo que haya hecho mal.

Predica con el ejemplo. 
Procura evitar utilizar la mentira y 
enséñale que tú también eres capaz de
reconocer tus errores.

¿Cómo debemos ver la mentira?

Colosenses 3:9: “No mintáis los  unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos”
Efesios 4:25: Por lo cual, dejada la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros.
Salmos 34:13: Guarda tu lengua de mal, Y tus labios de hablar engaño.
Salmos 119:104: De tus mandamientos he adquirido inteligencia: Por tanto he aborrecido todo camino de mentira.
Proverbios 12:17: El que habla verdad, declara justicia; Más el testigo mentiroso, engaño.
 
La Biblia dice que Dios aborrece la mentira. Lee: Proverbios 6:16-19

•.¸¸•´¯`•.¸¸. Patricia  .¸¸•´¯`•.¸¸.•








jueves, 20 de noviembre de 2014

MI HIJO ES UN ADOLESCENTE

La adolescencia es una época que sólo se recuerda feliz cuando se ha pasado y estamos en plena madurez, e incluso puede añorarse, simplemente porque la hemos olvidado… No hay que olvidar que etimológicamente adolescencia quiere decir crecer, desarrollarse pero también padecimiento, dolenciaEncontrarse a sí mismo de nuevo es la difícil tarea en la que está inmerso todo adolescente.
Hablemos ahora de nosotros. De los padres. ¿Qué hacer ante un hijo adolescente? ¿Debo ser autoritario, amigo? ¿Debo consentir, prohibir?… Los padres deberán formarse para afrontar esta etapa evolutiva. Deberán seguir las pautas de educación adecuadas para controlar y evitar el conflicto. Es importante que lean mucho sobre adolescencia. Sobre los cambios físicos, emocionales para poder entender su comportamiento. Piense en su adolescencia. Espere cambios de humor en el hijo que normalmente es muy alegre y prepárese para más conflictos en el futuro que surgirán a medida que su hijo encuentre su lugar como persona. Los padres que saben lo que les espera pueden enfrentarse mejor a ello. Y cuanto más informados estén los padres, menor será el dolor. Es muy difícil conseguir en estos años una buena relación. Yo diría que es utópico, pero siempre podremos atenuar un poco las consecuencias de la crisis en nuestra comunicación con ellos.

NUESTRA PRINCIPAL HERRAMIENTA: 

-LA COMUNICACIÓN-

 Muchas veces la causa de los conflictos familiares se encuentra en una comunicación deficiente.
Los niños no nacen sabiendo cómo expresar sus pensamientos y sentimientos de forma apropiada.
Hay que enseñarles a expresarse y a escuchar a los demás.
A menudo, también los padres necesitan mejorar sus habilidades comunicativas.
Es obvio que la manera de comunicarse define las relaciones entre las personas. 
La comunicación es el hilo emotivo que nos une con los demás.
Por eso, hablaremos hoy de las características de una comunicación adecuada entre padres e hijos adolescentes.

¿CÓMO NOS COMUNICAMOS?

La comunicación consta tanto de mensajes verbales como no verbales:
Los mensajes verbales: las palabras, lo que queremos decir, lo objetivo.
La comunicación no verbal: los gestos, el lenguaje corporal, cómo lo decimos. 
Transmite sentimientos y emociones, lo subjetivo. Su variedad es muy amplia y diversa:
-la expresión facial
-la mirada (directa, esquiva,…)
-la postura corporal (la manera de sentarse, de permanecer de pie o de caminar)
-los gestos de las manos
-la proximidad o la distancia que se mantenga respecto de la persona con que se está hablando, la utilización del espacio personal, el contacto físico…
-la orientación del cuerpo respecto del interlocutor (de frente, de lado, de espaldas)
-el tono de voz (tranquilo, agresivo, etc)
-el ritmo, la velocidad del habla, las pausas
-el mismo silencio…

Ideas para educar a un adolescente:

Los tres ingredientes principales y básicos son empatía, sentido común y, sobre todo, mucho amor: ponerse siempre en el lugar de su hijo, llegar a sentir como siente él (empatía), tratar de ser lógico, no dejarse llevar por el dramatismo, ni por los demás, ser consecuente (sentido común), y, sobre todo, quererle, pero quererle sin condiciones (amor, puro y duro, el más difícil pero el mejor, el amor a los hijos).
Restableciendo la confianza
Las siguientes tres cosas tienen qué suceder para restablecer la confianza:
- El adolescente debe darse cuenta que no puede dirigirse a sus padres y pedirles privilegios grandes o no razonables.
- Cuando pida privilegios pequeños los padres deben comenzar a concedérselos, si los padres no se los conceden, los adolescentes no tendrán la oportunidad de ganarse esa confianza nuevamente.
- El adolescente debe decirle a sus padres lo que va a hacer y hacerlo. Los padres deben revisar que él haya hecho lo que dijo.
 En otras palabras, los padres deben poner toda la responsabilidad en los hombros del adolescente, cuánta confianza les des debe estar totalmente basada en su comportamiento y su sentido de responsabilidad.
Cuando la confianza se daña entre padres e hijos, es necesario restablecerla. Es importante que el adolescente pueda ver la responsabilidad de sus acciones para poder restablecer la confianza.
No dejemos nunca que la confianza se acabe, hay que restablecerla a la brevedad posible, porque sin esto nunca podrás ayudar a tus hijos adolescentes; sin esa confianza no existirá una relación de afecto entre tú y él, habrá problemas serios en el futuro entre ustedes de tal manera que no llegarás a confiar en él nunca más, ni podrás ayudarlo.
Una cosa importante para desarrollar responsabilidad en el adolescente pudiera ser no el que la tarea que le diste sea realizada, sino que experimente las consecuencias de su comportamiento y se sienta responsable por lo que le pase.
En algunos casos el que la tarea y el quehacer se hagan debería ser la última cosa que el padre trate de hacer.
El primer paso es hacer que el adolescente esté consciente que hay diferentes consecuencias por su comportamiento; el segundo es enseñarle que él es responsable por lo que le pase; y el tercero es concientizar al adolescente que tú consistentemente llevarás a cabo lo que él decida.
 Adolescencia, hermosa edad donde tanto los padres como los hijos enfrentaremos nuevos retos; los niños dejan de ser niños, se quieren comportar como adultos
pero aún no tienen la madurez necesaria, el carácter y la responsabilidad. Por otro lado, los padres no entendemos cómo tratar a nuestros adolescentes, la
distancia se hace grande entre el padre y el hijo y, en la mayoría de los casos, surgen problemas como el aislamiento, el cambio de actitud y de pensamiento.

Todos los niños son bendiciones de Dios, y Él tiene un plan para cada uno
Salmos 139: 13-18
 •.¸¸•´¯`•.¸¸. Patricia  .¸¸•´¯`•.¸¸.•

  

martes, 18 de noviembre de 2014

EL ABC EN LA CRIANZA DE NUESTROS NIÑOS

Podríamos mirar muchos pasajes de la Biblia para saber qué hacer por nuestros hijos, pero nos concentraremos en:
Prov. 22.6: “Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él”. Vamos a descubrir en ese texto “El ABC en la crianza de nuestros niños”.

LA RESPONSABILIDAD
Como padres que somos, nosotros tenemos la responsabilidad de enseñarles y darles instrucción a nuestros hijos (Dt 6.3-7; Ef 6.4). En el texto, esa responsabilidad se recalca con estas palabras: “Instruye al niño”. Las palabras clave de esta frase son: “instruye” y “niño”.

 La palabra “instruye”: ¿Qué significa instruir al niño? Las definiciones del diccionario incluyen ideas como las que siguen:
1) hacer que crezca del modo que se desea (tal como la parra en el enrejado);
2) formar mediante la instrucción, la disciplina y los ejercicios;
3) prepararse (por ejemplo, mediante los ejercicios) para una prueba de habilidad.
Así, hablamos de hacer crecer una parra, adiestrar a un animal, o entrenar para un evento atlético. Sugiere que se requiere de tiempo y esfuerzo para la instrucción. Debemos entender que es necesario dedicar tiempo y esfuerzo para instruir.

ALGUNAS CONSIDERACIONES:
 Debe hacerse una distinción entre decir, enseñar e instruir. Decir es bueno; enseñar es mejor, pero instruir es lo óptimo. Veamos un ej.: Su hijo entra a la casa y cierra de golpe la puerta. Usted le dice: “Milo, por favor no cierres de golpe la puerta”. Eso es decir. Tal vez usted se toma el tiempo para explicarle por qué usted no desea que él cierre de golpe la puerta: “es un duro trato para la puerta y es un duro trato para mis nervios”. Eso es enseñar. Puede que usted le diga que de ese momento en adelante, cada vez que él cierre de golpe la puerta, él tendrá que salir, volver a entrar, y cerrar suavemente la puerta -veinticinco veces. Si usted cumple con ese requerimiento y es consecuente con éste, eso será instruir. La palabra que le dio origen es la misma que se usa para referirse a “el paladar, el cielo de la boca, las encías”. Por último, el término vino a significar: “dedicar, consagrar”. Cuando se refiere a los niños, la palabra hebrea de la que se traduce “instruir”, incluye el conocer en qué etapa de su desarrollo debe encontrarse el niño y hacer todo lo necesario para hacerlo alcanzar esa etapa. Luego, consideremos la palabra “niño”, pues a veces se malentiende este término. La palabra hebrea, de la cual se traduce “niño”, no se refiere simplemente a un niño de muy corta edad.
La palabra se usa en 1 Samuel 4.21 para referirse a un niño recién nacido y en 1 Samuel 1:27, para dar a entender un chico recién destetado. La misma palabra se refiere en Génesis 21.16, a un niño de una edad justo antes de la adolescencia; en Génesis 37.2, se refiere a un muchacho de diecisiete años; y en Génesis 34.19, a un joven listo para casarse.
De modo que, la palabra se aplica a todas las edades que tengan un hijo o hija, mientras se encuentre bajo el mismo techo de sus padres, desde la infancia hasta que llega a ser un joven adulto.
EL RESPETO
El segundo “principio” es el respeto. Hemos hecho énfasis varias veces en que el respeto es necesario para que haya hogares cristianos estables, y felices. El respeto es esencial para criar con buen resultado hijos que puedan arreglárselas en la vida. Uno de los temas comunes en casi todo libro sobre el matrimonio y la crianza de los hijos, es el de la necesidad de que haya respeto. Ese mismo énfasis en el respeto se encuentra en la Biblia. Algunas de las palabras de la Biblia que sugieren este concepto, son “gloria”, “honor”, además de la misma palabra “respeto”. No se peca de exceso al recalcar la necesidad de que haya respeto entre todos los miembros de la familia: El padre debe respetar a la madre:1ª Pedro les presentó a todos los esposos el desafío a “vivir con (sus esposas) sabiamente, dando honor a la mujer... como a coherederas de la gracia de la vida,...” (1 Pedro 3.7).
El elogio a “la mujer virtuosa” de Proverbios 31, hace notar que el esposo de ella se levanta y “la alaba” (verso 28).
Los hijos deben respetar a sus padres. El pasaje mejor conocido que se refiere a este respeto, se encuentra en Efesios 6: “Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra” (versos 1-3).
 SEGURIDAD
La responsabilidad de criar un hijo puede causar temor. De hecho, entre más conciencia tenga uno de esa responsabilidad, más temor le causará ésta. Cuando miramos la condición del mundo y la cantidad de jóvenes que “se echan a perder” nos vemos en la necesidad de que se nos dé aliento. Así, nuestro tercer principio es la seguridad. El texto que nos ocupa nos da esperanza con la frase que dice: “cuando fuere viejo no se apartará de él”. Permítame recalcar lo que este pasaje no está diciendo: No dice que “cuando fuere viejo volverá a él”. Hay algunos que buscan consolarse con la idea de que una vez que el hijo haya probado todo y esté asqueado, o esté demasiado decrépito como para poder seguir pecando, él volverá al camino que se le enseñó. Hay hijos que se extravían. Una vez entendidas las verdades generales de Proverbios 22.6, podremos hacernos cargo con confianza de la empresa que representa la crianza de nuestros hijos. Dios dice que podemos hacerlo. El está de nuestro lado; ¡Él estará con nosotros!
Una vez más hemos dicho que la crianza de los hijos, es  una tarea para la cual se requiere de tiempo —de mucho tiempo. Entienda que sus hijos no estarán con usted para siempre.
¡El tiempo pasa tan rápidamente! Antes de que usted se percate, sus hijos se habrán ido.
Permíteme invitarte a poner en práctica, mientras puedas, todo lo que sea necesario para instruir a tus hijos en su camino.., para que, cuando fueren viejos, no se aparten de él.

 El instruir al niño requiere de conocimiento.
El instruir a nuestros hijos requiere de tiempo.
El instruir a nuestros hijos también requiere de paciencia.
Cada niño es único; cada niño es diferente.
A cada niño debe instruírsele (criársele) teniendo presentes estas diferencias.
Cada hijo merece nuestra comprensión.
Aunque hay muchas influencias que dejarán su huella en la vida del niño, no hay otra que sea tan importante como la nuestra.
El pasaje recalca que un niño bien enseñado entra en un mundo hostil con muy buenas probabilidades a su favor.

    •.¸¸•´¯`•.¸¸. Patricia  .¸¸•´¯`•.¸¸.•




lunes, 17 de noviembre de 2014

TOMANDO EL “CONTROL” DEL CONSUMO TECNOLÓGICO EN CASA

En las últimas décadas, junto con el explosivo desarrollo tecnológico, especialmente de las llamadas Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) que incluyen televisión (TV), radio, música, videojuegos, telefonía, Internet, etc; se ha comprobado también, la gran influencia que estas tecnologías, a través de su omnipresencia en los hogares, escuelas, instituciones, etc, tienen sobre la salud infanto-juvenil.
Nuevas investigaciones, han dado cuenta de dicha influencia, particularmente en aspectos como conducta violenta, consumo de alcohol y drogas, conductas sexuales de riesgo, trastornos alimentarios, nutritivos y otros. Muchas de estas investigaciones han comenzado a dar luces sobre las bases neurológicas y neuropsicológicas de este fenómeno y las autoridades de salud de muchos países desarrollados han implementado políticas y medidas regulatorias y de educación para los niños y sus familias.
Existe actualmente conciencia de que los pediatras deben dialogar respecto a la exposición a estas tecnologías con los niños y sus padres y entregar educación basada en investigaciones científicas respecto al uso apropiado de los medios.
Al llegar al jardín los niños, en muchos casos, ya han visto aproximadamente 4.000 horas de televisión. La mayoría de los expertos en el desarrollo infantil están de acuerdo que esto es excesivo.
Pero prohibir la televisión tampoco es la respuesta correcta.

ALGUNAS SUGERENCIAS PARA LOS PAPIS

 Como papás sabemos los efectos de la televisión y videojuegos en el consumo, aprendizaje y conducta de los niños:
1- seleccione cuidadosamente aquellas cosas que usted desea que vea, que aprenda y que imite.
2-  mantenga un control sobre cuántas horas de televisión su niño ve cada semana y qué programas ve.
3– después de seleccionar los programas que son apropiados para su hijo, permita que él decida qué programas quiere ver. Prenda el televisor al comienzo del programa y apáguelo cuando se acabe.
4– después de ver un programa de televisión, jueguen o hagan otras actividades. Pídale al niño que le diga una palabra nueva que se aprendió durante el programa, hablen de ella, como puedo o quiero aplicarla. O pídale que haga su propia historia basada en uno de sus personajes favoritos que ve en la televisión.
5– incluya a toda la familia en la discusión y las actividades relacionadas con los programas de televisión.
6– asegúrese de nunca utilizar el televisor como “niñera”. Más bien, balancee la buena televisión con otras actividades agradables y educativas para su niño.
Busque programas que tengan:
- coherencia con su edad
- alguna lección que enseñar
- sean interesantes para el niño
- lo animen a escuchar y hacer preguntas
- le presenten nuevas ideas 
- le presenten nuevas experiencias
 A) Incidencia en el desarrollo cerebral del niño:
La televisión es una ventana al mundo que les permite a los niños desarrollar una gran sensibilidad y conocimiento, como por ejemplo por la ecología y el mundo animal; es parte integral de nuestra sociedad, y no solamente es informativa sino que también entretenida y permite además entregar educación ya sea directa o indirectamente en diversos aéreas incluyendo temas de salud pública. Los videojuegos y la TV son un entretenimiento "seguro", sin riesgo de accidente y permite a los padres realizar otras labores con tranquilidad, Sin embargo, es necesario tener en cuenta que el desarrollo neurológico y emocional del niño es distinto del adulto. La maduración cerebral finaliza alrededor de los 18 a 20 años y este proceso a nivel cortical ocurre desde aéreas posteriores hacia anterior, es decir, las áreas prefrontales son la ultimas en madurar. La corteza prefrontal (CPF) juega un papel crucial en funciones cerebrales superiores como la cognición, el control de la conducta, reflexión, juicio, etc. En niños menores de 5 años existe una marcada capacidad de fantasía y perciben las imágenes de la TV como reales y verdaderas. A diferencia del adulto, antes de los 10 años la capacidad de razonamiento crítico y relacional está limitado. Por lo anterior los menores de 10 años no deberían estar expuestos a telenovelas ni noticieros de TV cuyo sensacionalismo y crudeza de imágenes pueden provocar trastornos del sueño y miedos que alteran su diario vivir. Como alternativa podrían acceder a noticias a través de medios escritos que tienen un impacto emocional menor que la "pantalla".
La adolescencia temprana es una etapa de desorganización de la personalidad y de inestabilidad de las conductas. En el púber la dinámica central es encontrarse a si mismo y autodefinir la identidad. Los programas actuales dedicados a adolescentes, en general, carecen de contenido valórico y no responden a las necesidades e interrogantes propias de esta edad. Investigaciones han demostrado que adolescentes expuestos a mayor contenido sexual en los medios tienen más probabilidades de iniciar actividad sexual a más temprana edad.

B) TV videojuegos y aprendizaje:
La televisión y particularmente los video-juegos pueden ser una poderosa herramienta educativa, especialmente los videojuegos ya que poseen tres características especiales. En primer lugar el niño no es solo un espectador,sino que interactúa y se transforma en el actor principal del juego. Por otro lado, consigue la atención absoluta del jugador y tiene un refuerzo positivo a la acción ejecutada en forma inmediata. Debido a lo anterior si el contenido del juego es violento, la conducta violenta será aprendida fácilmente.
En un reciente estudio de Würzburg, tras examinar durante cuatro años a más de 350 niños de 4 a 8 años de edad con diversos consumos de TV (alto: 117 minutos diarios, medio: 69 minutos diarios y bajo 35 minutos diarios), los investigadores concluyeron que el exceso de televisión entretenida tiene una clara y negativa influencia en la capacidad de los pequeños a la hora de comprender lo que leen y, por ende, en su rendimiento académico.
Otros investigadores han encontrado que los entretenimientos electrónicos están llevando a una perturbadora declinación en la capacidad de juegos imaginativos entre los niños. Niños que tienen más capacidad imaginativa, desarrollan mayor destreza en su vocabulario en relación a niños que dedican menos tiempo a juegos creativos.
El desarrollar precozmente estas destrezas, predice la habilidad para ser creativo y generar alternativas de soluciones en los problemas de la vida diaria.
La observación e imitación en los niños pequeños toman como modelo a los padres, educadores, amigos y aquello que observan a través de los medios. En la televisión abierta de nuestro país el 89% de los programas en gran parte tienen escenas de violencia, ya sea física, psicológica o verbal.

 Las Tecnologías de la Información y Comunicación han transformado la vida cotidiana de los niños y sus familias. Pertenecemos a una cultura que no puede entenderse ni existe al margen de los medios de comunicación. Es necesario por lo tanto "preparar" al niño a comprender la cultura mediática, a tener un análisis crítico y a participar en ella prepositivamente.
Todo es lícito, pero no todo es de provecho. Todo es lícito, pero no todo edifica - 1° Corintios 10:23 -

     •.¸¸•´¯`•.¸¸. Patricia  .¸¸•´¯`•.¸¸.•





TRASTORNO ALIMENTICIO: ¿“Delgadez es sinónimo de éxito social”?

Desde hace un par de décadas, y mediante mensajes publicitarios en diferentes medios de comunicación, nos han hecho creer, y principalmente a adolescentes y jóvenes: Que el éxito primeramente comienza siendo extremadamente flaca, con determinadas medidas “estándar” y ciertas características físicas...para ser una persona completa, feliz y con éxito en todas las áreas, en especial, en lo social.
Claramente, un mensaje que nada tiene que ver con la realidad, y que es totalmente FALSO!
Los jóvenes son terreno propicio para este tipo de perversiones que no son otra cosa que una forma de adicción a las dietas y a los atracones de comida descontrolados, dañinos, peligrosos y muchas veces mortales. El hecho de estar transitando la adolescencia, con sus muchos cambios y ajustes, les hace más vulnerables.
Desde hace una década creció mucho el número de personas que se hacen “adictos” a las dietas y a los atracones, y la edad más frecuente oscila entre los 12 y 18 años, y aún se puede detectar hasta los 25 años.
Debido a estas estadísticas se puede decir, que una adicción surge, luego de asociar a la delgadez con el “éxito y la habilidad de triunfar” este sutil mensaje contenido en la publicidad de productos dietéticos, comidas light, productos de cosmética, marcas de ropa y los modelos de las vidrieras, imposibles de vestir sin llegar a un peso en que se expone la salud.
Todo el que aspira a triunfar debe verse como una de estas “modelos del aviso”.

CUIDADO CON LAS MODELOS DE AVISO!!! ADICCIÓN A LAS DIETAS

 Pero este modelo es inalcanzable, están muy retocadas para ocultar sus imperfecciones, tampoco dicen que una buena impresión gráfica elimina estrías, rollitos y hasta las flaccideces. Aspiran a ser una imagen “espectral” e imposible y se meten así, en un camino sin salida, irreal, que les hace perseguir algo vacío, ilusorio.
Definimos como “anorexia nerviosa” al rechazo sistemático a la comida, que se inicia a través de dietas rigurosas, iniciadas por decisión propia y suministradas sin control médico. Y llamamos “bulimia” al impulso descontrolado a comer, generando un atracón, que se acompaña de una gran carga de culpa y esto lleva a la persona a tener vómitos auto-provocados.
La anorexia y la bulimia, no son trastornos de conducta diferentes, sino dos aspectos de una misma perversión o hábito pecaminoso, motivado por el gran temor de engordar y la obsesión permanente de verse delgada, lo que ellas creen, que es sinónimo de belleza, éxito y felicidad. Esta pérdida de peso llega en muchas ocasiones a causar desnutrición, que en el 10% de los casos, llega a ser mortal. Según las estadísticas, en Argentina hay más de 300.000 mujeres entre 12 y 18 años que padecen síntomas de este problema y si el 10% llega a ser mortal, concluimos que, próximamente, morirán alrededor de 3.000 chicas por este mal.
Es urgente conocer y detectar a quienes están en esta zona de riesgo, para orientarlos y ayudarlos a confesar su real situación y cambiar su actitud, y en especial hablar a sus padres para ayudarlos a reajustar su conducta.
 ¿Cómo detectar este problema?
1. Se prohíben ciertos alimentos, comen poco o nada, usan dietas muy severas.
2. Usan rituales para la mesa, contando las calorías que aporta cada bocado.
3. Hablan de su gordura y mantienen su peso muy debajo de lo normal, o sea de lo que corresponde a su altura y a su edad.
4. No aceptan invitaciones a fiestas o reuniones por temor a ser obligados a comer.
5. Se esfuerzan en actividades físicas excesivas, como ejercicios y caminatas.
6. Tapan su cuerpo con
ropas oscuras y muy holgadas, se niegan a usar ropa de baño, considerándose siempre gordas.
7. Después de un atracón se auto desprecian y censuran, castigándose por medio de provocarse el vómito.
8. Usan siempre laxantes y diuréticos y abusan de los edulcorantes.
9. Cambian su carácter: se hacen irritables, inseguras, se enojan por nada, están aisladas.
10.Pierden piezas dentales y la menstruación, tienen palidez, son sensibles al frío y padecen de debilidad y mareos.
Las complicaciones que sobrevienen son pérdida de su trabajo, de sus amistades y de su
autoestima, pasan por estados de tristeza y miedo y, en muchos casos, hasta intentos de suicidio y en algunos la muerte.
¿Cómo enfrentar la anorexia y la bulimia?
“Como pecado”, pues son personas que no han aceptado el cuerpo que Dios les ha dado y eso es pecado; son personas que creen la mentira de los ambiciosos, que lucran con la salud y la vida de los adolescentes. La auto-conmiseración y el querer conseguir la estima y la elección de la pareja por el valor del cuerpo, son pecados y muy graves, que demuestran la falta de conocimiento
acerca de cómo piensa el autor de nuestro cuerpo, lo que la Biblia dice acerca del éxito en la vida y cuáles son lo verdaderos valores. La confesión de estos pecados es el comienzo. Luego deben aferrarse por la fe, a la persona de Jesucristo y a su ayuda para controlar el deseo del mal hábito ya instalado en el cuerpo. Se requiere de la lectura y la memorización de las Escrituras y orar a Dios cada día pidiendo que controle nuestra voluntad, abrir el corazón a Dios, dispuestos a obedecer su consejo, cambiando así los valores de su vida. Es necesaria una renovación de la mente, pues dice Prov. 12:20 “Engaño hay en el corazón de los que piensan el mal, pero alegría en el de los que piensan el bien”. Además no hay que conformarse al sistema de este mundo, sino entender que lo realmente importante es el interior, tener un espíritu afable y apacible que es de gran estima delante de Dios (1 Pe. 3:3-4).
Si quieres seguir el modelo de este mundo sólo conseguirás frustración, pero si quieres seguir el modelo que Dios nos dejó en su Palabra, entonces podrás comprobar la hermosura de la voluntad de Dios para tu vida.“No os conforméis a este siglo sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta” Romanos 12:2.

    •.¸¸•´¯`•.¸¸. Patricia  .¸¸•´¯`•.¸¸.•




   

viernes, 7 de noviembre de 2014

NO TE PREOCUPES, SÉ AGRADECIDO

Si Dios viste a sus campos, ¿No crees que Él va a cuidar de ti?  -Mt 6:28-
La gratitud es uno de los valores más apreciados y respetados a la hora de educar a los niños.
El aprender a dar las gracias o agradecer aporta bienestar y reconocimiento a los niños.
Como todos los demás valores, se enseña a dar las gracias con el ejemplo, modelando para los niños nuestras propias acciones de agradecer.
Padres agradecidos y considerados criarán a hijos agradecidos y considerados.
No importa la edad, la gratitud mejora la calidad de vida al enfocarse en lo que una persona tiene para sentirse agradecida en lugar de pensar en lo que no tienen.

 El enseñar a los niños a ser agradecidos crea un hábito para toda la vida de ver las cosas desde la perspectiva de la gratitud.
Es difícil enseñarle a los niños que no pueden tener todo lo que quieren, o lo que tienen sus amistades.
El estimularles a apreciar lo que tienen, a disfrutar la naturaleza, y a ahorrar para algo especial toma tiempo, atención, y paciencia.

¿Demuestra usted una actitud de gratitud en su familia?

Si no es así, puede empezar hoy, y verá como cambia su ánimo y le ayuda a sentirse conectado a los demás.
Alabad al Señor. Dar gracias a Jehová porque él es bueno, porque su misericordia es eterna. (Biblia)
 ALGUNOS CONSEJOS PARA LA FAMILIA
 Enfocarnos en aquello por lo que sentimos agradecimiento es un instrumento que puede tener un impacto profundo en nosotros mismos y en nuestras relaciones. Investigaciones señalan que el incorporar la gratitud en nuestras vidas puede fomentar nuestra salud física y mental, resultando en menos nervios y depresión, y más felicidad. Expresar agradecimiento en nuestras relaciones ayuda a que los demás se sientan reconocidos por sus esfuerzos y les motiva a continuar comportándose de la misma manera. Al fortalecer nuestras relaciones, la gratitud promueve nuestro éxito personal y familiar.
El mostrarle a nuestros niños cómo ser agradecidos les enseña un valor importante. La gratitud es un instrumento que les provee entendimiento y apreciación de sus alrededores (hogar, familia, educación, amigos).
 Les enseña a valorar los regalos que reciben. Les ayuda a desarrollar relaciones sanas con otros niños y adultos. Los beneficios del aprender a demostrar gratitud se extienden hasta la adultez.

¿Cómo incorporar el agradecimiento en nuestras familias?

Podemos incorporar la gratitud de muchas maneras. ¡Es útil y divertido reunirse en familia para acordar cómo hacerlo! Unas sugerencias:

-Tener un diario de gratitud familiar donde escriben cada día sobre lo que agradecen.
-Antes de cenar, cada integrante de la familia menciona algo por lo que está agradecido.
-Escribir cartas de agradecimiento a quienes han tenido influencias positivas en la familia.

 Se puede enseñar y practicar la gratitud de distintas maneras y en diferentes momentos del día. A la hora de educar a tu hijo en la gratitud, es importante que consideres la edad que tenga él. Sigue algunos consejos:

1- Hay que tener en cuenta que los niños menores de 2 años no entienden cuál es el sentido de dar las gracias. Pueden decir “gracias”, pero será más como una repetición de lo que le pidas de lo que realmente sienta él.
2- A partir de los 2 o 3 años, los niños ya tienen un concepto más amplio de la gratitud. Aprovechemos para enseñarles que el acto de agradecer es gratuito y que al agradecer no debemos esperar nada a cambio.
3- El ejemplo, tanto de los padres como de los familiares, es fundamental a la hora de inculcar este valor a los niños. El mejor maestro para enseñar gratitud a tus hijos eres tú.
4- Los niños deben aprender a dar las gracias no solo por lo material, sino también por algún gesto que hayan tenido con ellos. Gracias por darme la mano, por dejarme pasar, por llamarme, por haberme preparado el desayuno, la comida o la cena, etc.
5- Se debe enseñar a los niños a dar las gracias por las pequeñas cosas o acciones.
También a que sean agradecidos consigo mismos, por pequeños esfuerzos como hacer la cama, hacer la mochila, hacer los deberes, etc. Aparte de eso, también podemos enseñarles a dar las gracias por la cama tan buena que tienen, por su familias, hermanos, por su colegio, maestra, amigos… Eso les enseñará a valorar todo lo que tienen.
 6- Dar las gracias a las cosas positivas que les ocurre, incita a los niños a hacer siempre el bien. Debemos enseñar a un niño a ser agradecido no solo con palabras sino también con detalles, gestos, sonrisas, besos y abrazos…
7- A la hora de la cena, un buen ejercicio es charlar con los niños y preguntarles cuál ha sido el momento del día por lo que más le gustaría agradecer.
8- Otra idea es dar responsabilidades a los niños como recoger sus juguetes o ayudarte a poner la mesa, para que luego ellos se sientan valorados cuando les demos las gracias.
9- Otra sugerencia sería enseñar a los niños a elaborar tarjetas de agradecimiento en su fiesta de cumpleaños, por la presencia de cada amigo. Podría ser un dibujo o un simple mensaje de gracias.

Los adultos comunicamos nuestros valores por medio de nuestras expectativas, palabras, y acciones. Los niños ven lo que hacemos, y si nos ven mostrando generosidad hacia otros, aprenderán a ser generosos. Si nos ven agradecidos por las pequeñas cosas, no serán codiciosos. Si exigimos que usen buenos modales, aprenderán a decir “por favor” y “gracias.”

"Den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús."
(1 Tesalonicenses 5: 18)
 Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.
(1 Tesalonicenses 5:16-18)
Cuando hayas comido y estés satisfecho, Alaba al Señor tu Dios por la buena tierra que te ha dado. 
(Deuteronomio 08:10)
Doy gracias a Dios cada vez que me acuerdo de ti, en todas mis oraciones oro por todos ustedes, siempre oro con alegría.
(Filipenses 1:3-4)
Den gracias al Señor por su misericordia y sus maravillas para los hombres. 
(Salmo 107:8)


•.¸¸•´¯`•.¸¸. Patricia  .¸¸•´¯`•.¸¸.•